Cada 23 de septiembre se recuerda el día internacional de la trata y tráfico de personas desaparecidas presumiblemente para este fin ilícito que se acrecienta cada vez más en la sociedad y Bolivia no es indiferente a este hecho.
Desde que se dio vigencia a la Ley Integral contra la trata y tráfico de personas Ley No 263, hasta el primer semestre del 2016, la Dirección Nacional de Protección a víctimas y testigos registró 2.119 casos en Bolivia.
En la ciudad de El Alto, según la información del secretario de Seguridad Ciudadana, Dorian Ulloa, el año pasado se registraron 95 casos de trata y tráfico de personas y en esta gestión de enero a agosto se registraron 92 casos.
“Según los datos de la FELCC tenemos un total de 92 casos, son datos que nos ha llamado la atención, pero no es un tema que tenga que ver con un incremento de los casos sino con la visibilizarían de los casos. Normalmente los números tienden a subir porque los casos ya son denunciados y eso genera el fenómeno”, sostuvo.
De acuerdo con las estadísticas oficiales en el 2012 se registraron 318 casos, el 2013 registró 273 casos, 651 casos en el 2014, en el 2015 fueron 550 casos registrados y hasta el primer semestre del presente año se registraron 327 casos.
Hasta en 20 por ciento creció el delito de trata y tráfico en el país en los últimos dos años, según autoridades de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC).
La trata y tráfico de personas es la tercera forma de tráfico más extendida convirtiéndose en una dolorosa realidad en Bolivia, donde los indicadores se han disparado de forma alarmante en los últimos años, por otra parte está el tráfico de drogas y el de armas.
Los últimos datos oficiales al respecto, publicados el año pasado por la Defensoría del Pueblo, señalan que solo en 2014 el número de denuncias por trata fue de 549, un promedio semanal de más de 10 casos diarios en un solo año.
La trata de personas es la captación, traslado y recepción de personas para un determinado fin ilícito como la explotación sexual o laboral, la extracción de órganos o el turismo sexual, en cambio el tráfico de personas o el tráfico de migrantes es la facilitación de la entrada ilegal de una persona en otro Estado, con el fin de obtener un beneficio.
TRATA Y TRÁFICO DE PERSONAS
Es la acción de captar, transportar, trasladar, acoger o recibir personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, como el rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra con fines de explotación.
Las víctimas pueden ser trasladadas dentro o fuera del país. Son privadas de su libertad con el fin de ser explotadas en distintas formas; dentro del país las más recurrentes son: explotación laboral, explotación sexual comercial, guarda o adopción, mendicidad forzada, matrimonio servil, unión libre o de hecho, empleo en actividades delictivas, extracción de órganos.
Es la facilitación de la entrada ilegal de una persona en un Estado del cual dicha persona no sea nacional o residente permanente, con el fin de obtener un beneficio financiero u otro beneficio de orden material, en la mayoría de los casos el ingreso es con documentos ilegales o sin cumplir con los requisitos solicitados por ley. El tráfico de personas sólo se cumple cuando se cruza una frontera. (AMI)