La Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de la Ciudad de El Alto es una de las organizaciones con mayor representatividad dentro del Departamento de La Paz y reconocido a nivel nacional e internacional, por sus luchas reivindicatorias.
La esencia que lo convierte en paradigma social, radica en su “poder de convocatoria”, resultado de un largo proceso sincrético cuya base sustancial es la defensa de los vecinos en pro de la mejora de sus condiciones de vida.
La Federación de Juntas Vecinales de El Alto fue fundada el 8 de diciembre de 1966, con personería Jurídica reconocida mediante Resolución Suprema No. 200097 de 28 de julio de 1985. Pero su existencia a través de la Subfederación y Consejo Central de Vecinos se consolida el 3 de julio de 1957 , lo cual no le resta legitimidad ni legalidad.
La Fejuve de El Alto tiene como domicilio legal en la Av. 6 de marzo de la Zona Bolívar "A" del Distrito Municipal No. 1, asimilado como La Ceja, esta ha permitido ser el “cuartel de operaciones” de muchas movilizaciones que han tenido importancia en el desarrollo histórico de la ciudad de El Alto.
Reseña histórica de El Alto
El 23 de octubre de 1548, Alonso de Mendoza, a su llegaba desde Laja hizo un alto al borde de la planicie que actualmente constituye La Ceja de ciudad de El Alto, pudo apreciar con su vista panorámica el valle de Chuquiago Marka, donde se establecería Nuestra Señora de La Paz. A la llegada de los conquistadores españoles este lugar se convirtió en una de las vías principales de circulación hacia Chuquiago.
El primer denominativo que tuvo el territorio actual de El Alto fue "AItu Pata" en aimara. Aunque en el léxico aymara, lo correcto sería "Alay Pata" (tierra de arriba).
En 1810 ya existían en el sector algunas casas que se convirtieron en lugares de hospedaje a los comerciantes que transitaban entre Lima, Cusco, Potosí y Sucre. Durante el cerco a La Paz los aliados de Túpac Katari construyeron refugios temporales desde donde controlaban. Tras la revolución de 1809 la cabeza de Pedro Domingo Murillo fue expuesta en el lugar por entonces denominado Alto de Nuestra Señora de La Paz o Alto Pata.
Tras la creación de Bolivia en 1825, las tierras fueron despojadas a los ayllus indígenas, dando paso a la adquisición de tierras y creación de latifundios.
Al inicio del siglo XX, los ayllus y estancias que conformaban El Alto eran: Cupilupaca, Checalupaca, Chinchalla y Pucarani. Las tierras de El Alto pertenecían a unos cuantos hacendados entre ellos se menciona a Julio Téllez, Jorge Rodríguez Balanza, Adrián Castillo Nava, Raúl Jordán Velasco, Francisco Loza y la familia Zalles.
A partir de 1940, los hacendados empezaron a lotear sus tierras y formando urbanizaciones. El primer hacendado que vendió sus tierras fue el señor Julio Téllez Reyes, que posteriormente este lugar se llamaría "Urbanización Villa Dolores", creada el 14 de septiembre de 1942. De esta forma para la década de los 50 ya existían seis zonas o villas alrededor de la Ceja.
Primeras organizaciones vecinales en El Alto
En 1947, el ciudadano Manuel Chávez organizó la junta vecinal de Alto Lima, en la parte norte. Poco después se crearon la de Villa Ballivián y la de 16 de Julio. El 3 de julio de 1957 se instituye la Subfederación y Consejo Central de Vecinos, representando a más de 45.000 vecinos en 7 juntas vecinales; hecho que le dio legitimidad a la transformación de una Federación de Juntas Vecinales de la ciudad de El Alto.
El 8 de diciembre de 1966 se crea la Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de El Alto, a partir de los años 1976 a 1986, el fenómeno del crecimiento urbano fue tan notorio en El Alto que proliferaban zonas que se extendían hacia todas las secciones de El Alto.
Este crecimiento demográfico trajo consigo problemas en las condiciones y calidad de vida en comparación a su vecina ciudad; los servicios básicos eran precarios, muchas viviendas no contaban con electricidad, agua potable, alcantarillado y el transporte era insuficiente, ante esto los vecinos decidieron organizarse y conformar una junta vecinal independiente y autónoma. El año 1979 en el Primer Congreso de Juntas de Vecinos de Bolivia, fue reconocido como FEJUVE de El Alto.
La FEJUVE de El Alto en la historia de Bolivia
A partir de ese proceso la FEJUVE El Alto, encabezó las demandas sociales ante las autoridades de la alcaldía de La Paz.
En 1984, entre la FEJUVE y el Frente de Unidad y Renovación Independiente de El Alto (FURIA), conformada por ex-dirigentes de las Juntas Vecinales, asumen la tarea de llevar adelante la autonomía administrativa y logran que el Congreso dictamine el 6 de Marzo de 1985, la creación de la Cuarta Sección de la provincia Murillo, con su capital la ciudad de El Alto, mediante la Ley No. 728.
Las medidas económicas y sociales adoptadas por el régimen de Víctor Paz Estensoro mediante el decreto supremo 21060, impulsó las migraciones de centros mineros a urbanos, y El Alto se convirtió en una fuerza de crecimiento demográfico y de expansión territorial, pese a no tener los servicios y equipamiento necesarios para dar una mejor calidad de vida a sus pobladores.
La Fejuve de El Alto tuvo su mayor participación en la historia boliviana con los luctuosos hechos de octubre de 2003 en la llamada "Guerra del gas", donde el pueblo alteño a la cabeza de la junta de vecinos le dijo a Gonzalo Sánchez de Lozada "¡No a la venta del gas!".
El 2016 la FEJUVE El Alto, tras varios sucesos, cumple 50 años como institución de lucha del pueblo alteño, velando el cumplimiento de la voluntad popular de las juntas de vecinos a lo largo y ancho de esta urbe.
La Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de El Alto se constituye en la primera organización representativa, junto con la COR, Federación de Gremiales, FEDEPAF, FUTECRA, COCEDAL, Comité de Vigilancia, UPEA, Federación de Mercados, etc, respaldado por un pueblo movilizado y dueño de su propia historia y decisiones.
Texto: Radio Fejuve y Alejandro Quispe
Fotos: Facebook/Fotos Antiguas La Paz; Cambio y Alejandro Quispe