23 dic.- En constante vigilancia, pero sin grandes sobresaltos, el COVID-19 pasó de ser una emergencia sanitaria en el país a una enfermedad sin mayor relevancia. No obstante, desde hace dos semanas, los datos de contagios han llamado de nuevo la atención.
El Ministerio de Salud confirmó dos semanas consecutivas de incremento de casos, mientras llega la temporada de fiestas de fin de año, en que las familias se reúnen, viajan y la cercanía suele ser mayor. Los datos aún no generan alarma, pero las autoridades sanitarias sí llaman a la población a reflexionar y acudir a los casi olvidados puntos de vacunación.
“Los números no nos tienen que preocupar, más bien nos tienen que llevar a reflexionar, a tomar precauciones. Tenemos una importante cantidad de vacunas que ya han llegado a nuestro país las semanas pasadas y han sido distribuidas”, expresó la ministra de Salud, María Renée Castro, según una nota institucional.
El nuevo lote distribuido consiste en más de 600.000 dosis Pfizer, divididas entre pediátricas y de adultos. La repartición se hizo efectiva a los nueve departamentos, ahora, es tarea de los Servicios Departamentales de Salud (Sedes) ejecutar las estrategias, y de la población, recibir su inmunización.
“Hemos empezado con la vacunación en todos los departamentos y hay que promover esa herramienta de lucha contra el SARS-COV2 que causa la COVID-19”, expresó la ministra.
Para la aplicación de este lote, que es por primera vez diferenciado por edades, se aplica una nueva estrategia. Las dosis pediátricas se aplican a niños de entre cinco y 11 años; las de adultos, para quienes tienen 12 años en adelante.
El Ministerio de Salud detalló que los mayores de 12 años que ya tengan alguna dosis de la vacuna contra el COVID-19 pueden acceder a su refuerzo anual, siempre y cuando haya pasado al menos 12 meses desde su última inoculación. La misma orden es para los grupos de riesgo: mayores de 60 años con o sin enfermedad de base, personal de salud y embarazadas.
La inmunización con este lote también hará una diferenciación de cantidad de dosis, según el estado de salud del paciente. Las personas que tienen el sistema inmunitario debilitado, accederán a “tres dosis: la primera al contacto (apenas acuda al centro de salud); la segunda, a las tres semanas después de la primera dosis (21 días); y la tercera dosis, seis meses después de la segunda dosis”, puntualizó la cartera estatal.
A la par, las medidas de bioseguridad, ya olvidadas por muchos, serán fundamentales para evitar un rebrote. El cumplimiento de éstas, junto con la vacunación, es recomendado con insistencia por las autoridades sanitarias, más aún con el inicio de las fiestas de fin de año y las acostumbradas reuniones y viajes.
“Es necesario que todas las personas tomemos nuestros recaudos para poder estar seguras lo más antes posible. La primera herramienta es la vacunación; nuestra segunda herramienta siempre va a ser las tres M: manos, máscara y metros de distancia”, pidió la ministra.
Los casos de COVID-19 registran dos semanas consecutivas de incremento. Entre las semanas epidemiológicas 48 y 49, los contagios se incrementaron en 56%, de 194 a 303 positivos; en tanto que para la semana 50, esta última, el ascenso fue de 60%, de 303 a 487 casos. En ambos reportes, Cochabamba registró la mayor cantidad de casos.
Además de vacunas, Salud garantizó la disponibilidad de pruebas, por lo que se incentivó a buscar un diagnóstico ante los síntomas. Las pruebas tomadas son también motivo de seguimiento y vigilancia para identificar la posible presencia de nuevas variantes del COVID-19.
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